Casa biopasiva: qué es y diferencias con casa pasiva
Una casa biopasiva es una vivienda que abarca los principios de una casa pasiva y va más allá al integrar aspectos adicionales de salud y sostenibilidad en su diseño y construcción. Además de maximizar la eficiencia energética y el confort térmico, una casa biopasiva se preocupa por la calidad del aire interior, la elección de materiales de construcción no tóxicos y naturales, así como la implementación de estrategias sostenibles para reducir el impacto ambiental.
¿Qué es una casa biopasiva?
En términos de salud, una casa biopasiva se centra en garantizar un ambiente interior saludable para sus ocupantes. Esto implica la elección de materiales que no emitan sustancias tóxicas o alérgenos, así como la implementación de sistemas de ventilación de recuperación de calor y filtración de aire para mantener una calidad del aire óptima. Además, se considera la iluminación natural y el diseño ergonómico para promover el bienestar de los residentes.
En cuanto a la sostenibilidad, una construcción biopasiva busca minimizar el impacto ambiental. Esto puede incluir el uso de energías renovables, como paneles solares o sistemas de geotermia, la captación y reutilización de agua de lluvia, el uso de materiales de construcción reciclados o reciclables, así como estrategias de paisajismo sostenible.
Una casa biopasiva es una vivienda que integra los principios de una casa pasiva con un enfoque ampliado en la salud y la sostenibilidad. Busca crear un hogar saludable y respetuoso con el medio ambiente, proporcionando una alta eficiencia energética, una calidad del aire interior óptima y un menor impacto ambiental.
¿Cuáles son las diferencias con una casa pasiva?
La casa biopasiva es una evolución de la casa pasiva que se enfoca en crear viviendas que sean saludables y sostenibles tanto para los ocupantes como para el entorno natural.
Además de los principios de diseño pasivo, la casa biopasiva incorpora características y materiales que promueven la calidad del aire interior, como sistemas de ventilación de recuperación de calor y el uso de materiales de construcción no tóxicos y naturales.
Las casas biopasivas también pueden incluir estrategias para capturar y utilizar energías renovables, como paneles solares fotovoltaicos o sistemas de recolección de agua de lluvia.
La casa pasiva se centra en maximizar la eficiencia energética y el confort térmico mediante el diseño adecuado de la vivienda, mientras que la casa biopasiva va un paso más allá al considerar aspectos de salud y sostenibilidad en el entorno construido. Ambos enfoques son altamente beneficiosos para reducir el consumo de energía y promover un ambiente interior saludable.
